La verdad es que no puedo decir una fecha exacta, lo único que sé es que desde siempre, desde que uno tiene uso de razón, recuerdo tener un balón a mi lado.

Mi primer balón me lo regalaron por mi primer cumpleaños y pasado el tiempo he de reconocer que ha sido el regalo más fructífero que he recibido en mi vida. A mis padres les extrañó desde un primer momento ese apego que sentí por algo tan simple como una pelota de plástico. Me levantaba con el balón, desayunaba con él, lo llevaba a la guardería, comía con él e incluso lo dejaba dormir en mi propia cama.

Fui un niño al que le costó mucho empezar a caminar, creo que por una desidia considerable, e incluso en ese aspecto debo de agradecerle tanto a aquel balón, pues mi mayor motivación era perseguirlo por el pasillo de casa después de golpearlo con el pie.

A día de hoy, 34 años después, echo la vista atrás y observo que mi vida no ha cambiado tanto, pues ahora soy yo el que anima a mi hijo de un año a andar ayudado por un balón de peluche.

Y muchos os preguntareis por qué hago esto con mi hijo. Las razones son dos básicamente:

- Primero, el balón le sirve a mi hijo de motivación para caminar, porque le cuesta igual que al padre mover el culo.
- Y segundo y más importante, si yo tuve una infancia tan feliz con un balón, ¿por qué no intentarlo con mi hijo? Al fin y al cabo todo padre busca la felicidad de su vástago y hace lo que sea por conseguirla. En ese sentido mi padre lo tuvo fácil conmigo, pues rápidamente dio con la tecla.

Me vais a permitir que este primer post de mi recién estrenado blog vaya dedicado a mi padre, que hace apenas unos meses nos ha dejado, ya que sin su forma de educarme en los valores del deporte(del fútbol en particular) no hubiese llegado a donde estoy ahora mismo: comenzando un nuevo proyecto que llevaba maquinando mucho tiempo y en el que tantas esperanzas tengo de poder transmitir mi pasión por el deporte rey con todos vosotros.

Mi padre fue jugador (lateral izquierdo con buen pie) entrenador y sobre todo un apasionado del fútbol. Recuerdo ver infinidad de partidos con él, esforzándose por explicarme los diferentes sistemas de juego, jugadas a balón parado, estilos de ataque, tipos de marcaje,...y haciéndome ver el porqué de los resultados que se daban en los partidos, pues él opinaba que en el mundo del fútbol 2+2 no siempre son 4, pero un 90% de las veces si.

Él me transmitió esta pasión por un deporte, al que amo por encima de muchas otras cosas, pues como bien dijo en su día Jorge Valdano "el fútbol es lo más importante entre las cosas menos importantes". Por ello no puedo estarle más que agradecido: GRACIAS PAPÁ!

No puedo olvidarme de mencionar a mi mujer, Sara, por todas las facilidades y apoyos que me transmite día tras día para que pueda seguir disfrutando con este deporte, con el que nunca dejo ni dejaré de ser feliz. Gracias por todo tu ánimo y comprensión cariño!

Y por último hacer una mención especial a mi primo Tomás, encargado de la parte técnica del blog, que tanto empeño ha puesto para que este espacio sea un sueño hecho realidad. GRACIAS LITTLE!

Una vez realizados los agradecimientos, comenzamos con esta aventura futbolística, en la que todas las opiniones y críticas serán bien recibidas, pues soy de los que piensa que en el fútbol, igual que en todos los ámbitos de la vida, uno siempre tiene cosas que aprender. Espero que esta experiencia sea de utilidad para unos, provechosa para otros y lúdica para todos. Arrancamos...